Meditar en casa

Por Lorenzo Olivera

Si lo que quieres es saber cómo empezar a meditar, primero ten en cuenta que la meditación es un estado mental muy fuerte, en el cual nos capacitamos para llevar un mejor estilo de vida, relajarnos, callar el ruido de nuestros problemas y aprender a concentrarnos.

Se debe tener claro que la meditación no es magia. Nadie se comunica con nosotros (dioses) no se hace ningún tipo de hechizos, no podemos viajar al pasado. Nuestra mente es increíblemente maravillosa, y tiene muchas semejanzas a una computadora avanzada, puede contener información en todos los niveles y ajustarse a cada necesidad. El problema radica, que cada vez genera más ruido, y como cualquier pequeño caprichoso pida más y más atención

Nada de las cosas externas pueden afectarnos o causar algún inconveniente, las preocupaciones las generamos o producimos nosotros mismos, pero si dejamos nuestra mente tal cual ésta, la misma se calmara. Pensamientos positivos atraerán más cosas positivas a tu vida.

Ese ruido, evita la necesidad de comprender ¿Quiénes somos? No nos permite examinar nuestro interior, además de no dejar que tomemos responsabilidades por nuestros actos. Pienso que meditar es una necesidad vital, pero cada uno de nosotros sabe cuándo y dónde empezar. Así que alístate para esté grandioso viaje de la meditación

Te facilitamos cómo empezar a meditar desde la comodidad de tu hogar
1- La hora adecuada
Es importante escaparse del ajetreo diario y conectarse consigo misma. Organízate y encuentra ese momento perfecto. 30 minutos después de despertar, te ayudaran a tener una mayor concentración, no estarás cansada, y podrás empezar a meditar llena de energía. El momento recomendado seria, en esos instantes del día dónde el sol sale y, se esconde pues la transición natural hace de tu sesión un verdadero relajo espiritual.

2- Postura correcta
No tiene nada de extraño que medites en una silla en la sala de tu casa o departamento, lo que realmente importa es que tú espalda este recta. Y que estés consciente durante toda la sesión. Así que si decides sentarte en una silla, con tus glúteos hasta detrás, recuerda no recostar tu espalda en la misma. Permanece siempre recta durante toda la sesión.
Los ojos deben estar totalmente cerrados, es muy probable que te de mucho sueño en las primeras sesiones, simplemente abre los ojos por un momento para que te de luz y evites quedarte dormida.

Las manos van colocadas en las piernas, y la cabeza algo inclinada hacia delante. La mandíbula hay que relajarla y colocar la lengua detrás de los dientes superiores. La mayoría piensa que para meditar hay que tener una postura de flor de loto, cosa que es irrelevante.

3- Tiempo estimado de 10 minutos
No necesitamos meditar por 2 horas, una sesión de 10 minutos será totalmente óptima. Suena fácil, pero dedicar 10 minutos a nuestra mente es algo complicado y aún más cuando tenemos los ojos cerrados. Lo estipulado son 20 minutos pero con la práctica lo alcanzaras fácilmente. No te preocupes por el tiempo, utiliza un despertador o cualquier canción de mp3 que te indique que el tiempo ha expirado.

4- Cuerpo y respiración
Luego de tener un lugar sereno, dónde no te molesten. Al empezar a meditar ponle atención a tu cuerpo, a esas simples cosas, a tus pies, tus piernas, a tus manos, al calor o el frio. Siente como la gravedad actúa en ti, los hombros caen hacia el suelo, tus glúteos se sujetan a la silla. Nuestros ojos están cerrados y nuestra mente empieza a mostrar cientos y cientos de imágenes.
Si te concentras en la oscuridad, en tus extremidades, y teniendo una correcta respiración, la meditación será más fácil. Se recomienda una respiración diafragmática con aspiraciones y exhalaciones profundas e intercaladas, para que tengas mayor seguridad de ti y tu mente. Siente la manera como el aire entra y sale de tu cuerpo a través de la nariz. Enfócate en todo lo que llegues a sentir y concéntrate en eso.

5- Elimina cualquier tipo de ruido distractor
¡Apaga el bobometro! (celular) si eres del tipo que no puede vivir sin ese medio de comunicación y te encanta responder cada uno de los textos que te envían. Te recomiendo apagar el celular y cualquier aparato que te distraiga.
Si vives en alguna parte céntrica el ruido será muy constante. Esos ruidos tienden a cortar la concentración e interrumpir tu sesión. Es esencial que aprendas a escucharlos y diferenciarlos, analizar los que no son de importancia y desecharlos de tus pensamientos. Y volver a una concentración total.

6- Una suave sonrisa
A la hora de meditar notarás la tranquilidad que puede causar una suave sonrisa en tu rostro, además de impulsar la sesión y aportarte serenidad.

7- Realiza la meditación con el estómago vacío
Recuerda que a la hora de meditar es conveniente no haber comido antes de la sesión, de lo contrario es muy probable que te quedes dormido. ¡no te apures! si consideras no aguantar, es preferible que comas y después de 2 horas inicies, lo esencial es siempre pensar en ti mismo y tu interior, así evitaras pensar en el deseo de alimentarte.

8- Ejercita con un poco de calentamiento
Inicia con ejercicios básicos de rutina o sencillamente con esos ejercicios de yoga que son muy prácticos antes de realizar tu meditación, te ayudan a tener una buena circulación liberarte del estrés y que te sientas más liviana sin esas cargas negativas que invaden todo tu cuerpo. Con este sencillo calentamiento podrás permanecer sentada por mucho más tiempo.

9- Al terminar
Tomate tu tiempo para empezar a abrir tus ojos de forma gradual y lente, sin apuros vuelve a tomar consciencia de ti misma y el entorno que te rodea. Habrás finalizado tu sesión. Y la sensación de paz será increíble.

Encuentra un grupo de meditación
Algunas personas prefieren la soledad a la hora de meditar, busca en tu ciudad algún grupo o centro de meditación. Ten especial cuidado, con aquellas personas que te inclinan hacia el feng shui, hechizos, ángeles, entre otros. Generalmente van por tu dinero y no por tu paz interior.

Su finalidad es hacerte encontrar ese equilibrio permanente, aprende hacer honestamente feliz contigo mismo, encontrar tu posición en el universo, a conectarte, comprender aún más la vida y su verdadero propósito.
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Debes ser paciente, los resultados vendrán solos, a medida que el tiempo transcurra sentirás dichos resultados. Se constante, fija un horario flexible que puedas cumplir todos los días y de esta manera nuestra mente se adapte a nuestro nuevo estilo de vida.
El maestro zen Suzuki; expresa que cuando se practica la meditación no hay que detener el pensamiento, decía, que así como llega debe irse. Ya que si forzamos detenerlo lo más probable es que caigamos en preocupación. En ese momento nuestra respiración será algo lenta y nuestros latidos del corazón comenzaran a acelerarse.

¿Qué esperas? ¡Empieza ya! Y envuélvete de todo el positivismo y la tranquilidad que la meditación trae para ti. Desde la comodidad de tu hogar inicia esta maravillosa práctica y cuéntanos qué tal te va.
Recuerda, “la práctica hace al maestro” llegarás tan lejos como te lo propongas.