Desfile BAFWeek
La primavera – verano 2013/2014 se hizo presente en las pasarelas argentina con diseños emergentes y nuevas texturas donde se impondrían los tonos el blanco y negro, los tonos cítricos, las transparencias y el top como prenda “it”.
Sentate en primera fila y disfruta lo mejor de cada desfile.
Jazmín Chebar abrió esta nueva edición de BAFWEEK con una fiesta súper exclusiva en Paseo Alcorta. Fantasy Island fue el concepto elegido para una noche sin precedentes. Un gran pórtico con estampa tropical atravesó el pasillo del primer piso del shopping, a la altura del local de Jazmín Chebar y marcaba la entrada al evento. Los 400 invitados, entre los que había muchísimos famosos, se repartieron entre la tienda, que permaneció abierta hasta la medianoche con la nueva colección en sus percheros, divertidos carritos de comida (a cargo de Narda Lepes), una caja photo booth y una imperdible máquina atrapa-sorpresas, que cautivó a todos en una noche inolvidable.
Josephine. La pasarela se vistió de verano con un mix de street chic y el arte de Stuart Semple en las estampas. En una propuesta en la que se imponen el clásico blanco y negro (tendencia absoluta), el amarillo, el azul Francia, el verde militar, el gris en todas sus versiones, el plateado y el dorado, se vio una silueta amplia –sin perder lo femenino- que dijo presente en remerascon full prints, gabardinas con neocamuflados, shorts, polleras mini vestidos. A los pies: sandalias gladiadoras largas y cortas ybotas metalizadas en plateado y dorado.
La ciudad de moda
Andrea Urquizu. Con el clásico dúo blanco y negro en todas sus prendas, la colección está completamente inspirada en Mick y Bianca Jagger e interpreta lo mejor de los 70 desde el minimalismo y la sastrería con aires sofisticados. Con siluetas típicas de esos años, hubo faldas acampanadas, tablas con diferentes trabajos y bordados no tradicionales. Las texturas elegidas son la gabardina fría, gasas, satén, canvas y algodón pima.
Profeta Style. El primer desfile de la tarde, ya en La Rural, apostó a los opuestos: es una colección de estilo neo-deportivo urbano que navega entre el nuevo lujo excesivo y la decadencia total. Siguiendo esta línea, se combinan texturas como sedas naturales, organzas y lamés (con procesos de flock y calado) con cueros laminados y engomados. Con juegos de trasparencias, la paleta apostó por los brillos y tonos cítricos, tornasoles, blancos ópticos, peltres y azul Francia.
Giacobbe. El diseñador presentó su línea bridal y pret- a-couture inspirada en “Las Nereidas”, la fuente creada por Lola Mora. Una propuesta ultra femenina con prendas súper fluidas y etéreas. Las texturas elegidas son organza de seda, cuero de oveja, sedas, tules, cristales y vidrios antiguos. La paleta apuesta por los tonos natural, rosa empolvado, celeste cielo y negro. ¿Lo mejor? Los detalles que sumaron el toque chic y delicado: los volados y las mariposas aplicadas.
Joan Martorello. Fusión rústica-deportiva, la colección parte de una visión a futuro de mixtura racial que fusiona piezas de sastrería europea, asiática y africana con elementos deportivos. Los colores combinan cementos, hueso, grises y naranjas desaturados en texturas nobles como el lino, el lino quebrado, sedas rústicas y telas deportivas.
Belén Amigo. Una pasarela plena de prendas lánguidas, románticas y minimalistas en una colección de sport-couture que impone combinaciones ultra vibrantes y caprichosas de colores y texturas. Seda, lúrex, bordados, reptil, cuero y algodón conviven en un mismo look en combinaciones que exaltan los sentidos y estimulan el deseo. La paleta experimenta los verdes, el visón, el beige y el rosa. El blanco es la constante y se combina con todos los tonos mientras que el negro se impone en los equipos de noche y en primeras pieles adherentes como tops y cullotes. Para la noche, outfits manchados por el negro generando marrones y grises.
