El sangriento vampiro alemán

Peter Kürten no era un actor de Hollywood y sus víctimas sangraban de verdad.

El sexo era un elemento indispensable de su rutina criminal y también cumplía con el requisito de beber sangre. “A mi con la sangre me pasa igual que los alcohólicos, no puedo vivir sin ella” decía el Vampiro de Düsseldorf.

Fue un 9 de septiembre de 1856 cuando en una ruina de Düsseldorf, unos obreros hallaron lo que para ellos era el esqueleto de un oso. Era 18 los huesos que yacían en el interior de una cueva llamada Feldhof.

Luego al estudiar el esqueleto el anatomista Hermann Schaaffhausen, descubrió que eso restos hallados pertenecían a un ser humano, pero muy antiguo y un poco diferente al hombre. Un año mas tarde a esos restos hallados en Düsseldorf se los llamo el hombre de neandertal. Luego de conocer que tenía como mínimo 40 mil años, uno se imagina el lío que debe haber armado dentro de la ciencia y las religiones de aquel entonces.

En 1859 Charles Darwin publica “El origen de las especies”, del cual los restos hallados en Düsseldorf le dieron un impulso muy importante a su teoría, sobre la evolución de las especies, porque el hombre de neandertal era mas parecido a un mono que al hombre moderno.

Ese lugar de Alemania se debería recordar por todos esos hallazgos y descubrimiento tan importantes para la ciencia y la historia del hombre. Sin embargo no fue así.

Llega el vampiro a Düsseldorf

En 1883, un 26 caótico día de mayo, nace en Colonia (Mülheim) Peter Kürten, siendo uno de los “trece” hijos de un albañil alcohólico, que maltrataba a su mujer, hijos y todo lo que se le pusiera adelante.

Con esa imagen paterna y con tan solo 8 años de edad el pequeño Peter huye de su hogar temiendo por la represalias de su padre. Cronistas de la época decía que el niño Kürten ya comenzó sus fechorías en su casa, que luego la llevaría a la ciudad de Düsseldorf en forma por demás sanguinaria y patética.

Al pie del post te espera un obsequio muy especial, una joyita del cine de los años 30′. Una de las primeras películas de la industria del caminante nocturno, en español.

Con tan solo una año de conocer la nueva ciudad que lo cobijaría hasta sus últimos día, logró sus primeras dos víctimas entre sus amigo los cuales ahogó en el río Rin, sin motivo aparente. Desde chico se le temía por ello su crianza fue a base de sus estancia en reformatorios y cárceles. Sin embargo salió siendo joven de la última penitencia social y fue contratado en una perrera y allí experimentó el “placer” de torturar, violar y matar a perros abandonados. No fue el único caso en la vida de Kürten donde experimentaría experiencias sexuales y torturas a animales. ¿Sádico el alemán , no?. ¿Se imaginan lo que sería este loco como ministro en la época Nazi?

Te puede interesar: El Vampiro romántico

La crónica de la época cuenta que a medida que pasaban los años y se ponía maduro, los instintos sanguinarios de Peter Kürten iban incrementando. Ya no se conformaría solo con sangre y depravación en animales. Ahora Peter, iría por los humanos.

Trece días antes de su cumpleaños y paradójicamente un día 13 de mayo, estuvo vigilando una casa, que se suponía vacía para entrar y robar. Pero en su interior, se encontraba un premio para los bajos instintos de Kürten. Porque allí yacía una niña sola durmiendo. Y paradójicamente, esto de verdad lo dice la crónica, la chica tenía 13 años de edad. Una mantequita realmente para nuestro desquiciado y noble alemán. No se sabe bien en cual orden procedió, pero si se sabe que la violó, la degolló y se bebió la sangre.

Si a esta altura algún lector de asqueó con este relato y lo quiere dejar por acá, no lo culpo. Sin embargo falta un poco más para que lo capturen y la historia se vuelve aun más interesante y macabra. Se reconocieron dieciséis victimas que cayeron en las garras de Kürten. Todas fueron tratadas con las misma rutina, criminen de contenido sexual y nueve de estas víctimas, fueron desangradas para beber su sangre. Un dato para agregar sobre este particular asesino en serie, es destacar que la Industria del cine lo llevó a la pantalla en 1931 y que al asesino alemán lo interpreta un tocayo, el magistral actor austríaco Peter Lorre.

Lo cierto es que llega la primera guerra mundial y Peter la pasó mas entre rejas que afuera. Sin embargo en 1921 se traslada a Altenburgo y consigue un laburo como camionero y se casa y su mujer pertenecía a una respetable familia.

Luego de 4 años de hacer buena letra, no pudo contra sus malos genes y en 1925 salio al ruedo a cometer sus terribles fechorías. Para ello volvió a Düsseldorf y arrancó allí su serie de crímenes. Una de sus víctimas (Rosa Ohlijer, de ocho años de edad) fue apuñalada “trece veces” con unas tijeras y tras beber su sangre, quemó su cuerpo con nafta.

Ya falta poco, sin embargo entramos a la parte interesante, o sea el desenlace final. Pero aún, el alemán sigue su fiesta de sangre, mató a una niña de 8 años, luego a dos hermanas de cinco y catorce años y su locura e impunidad llega a tal límite que el 7 de noviembre descuartiza a una niña de 5 años y le envía a un periódico local el mapa de la tumba de la asesinada.

Era tal la histeria provocada por Kürten en Düsseldorf, que nadie se atrevía a caminar solo por sus calles, se ofrecía una suculenta recompensa por lograr información sobre el asesino y la policía llegó a tener hasta 900.000 nombres de sospechosos.

Peter Kürten estaba tan confiado que comete un error. Así cae el vampiro de Dusseldorf

Dos meses antes de que Uruguay festeje su tercer campeonato olímpico, recordemos que dicho certamen se jugó en el Estadio Centenario entre el 13 y el 30 de julio de 1930. Entonces en el mes de mayo para ser más exacto de 1930, el criminal mas buscado de Alemania, el vampiro de Dusseldorf, se confía y es atrapado. Para ser más exactos todavía, ni siquiera lo tienen que perseguir ni irlo a buscar.

El asesino en serie cae cuando, María Budlick, una empleada doméstica y su última víctima, es atraída por el malhechor y guiada a un bosque cercano para ser violada y estrangulada. Sin embargo Budlick, no se sabe cómo sobrevive y presurosa fue la policía. Por primera vez los custodias del orden público, tuvieron la descripción de Kürten y salieron en estampida en su búsqueda. En poco tiempo ya tenían su retrato tapizando las calles de Dusseldorf.

Sin embargo hasta lo último Kürten quería sacarle partido a todo. Porque pensaba tomarse el ‘buque’ de Alemania y para ello necesitaba dinero. Entonces, sabiendo del suculento rescate que pedía por el, le pidió a su esposa que lo delatara a cambio de la recompensa. Para ello y sin anestesia le contó su historia, con lo cual la cara de su mujer comenzó a tomar todo tipo de formas y colores.

Cuentan que la mujer escandalizada no dudó en entregarlo a la policía y declarar en su contra. Y aunque luego Kürten negara cada una de las acusaciones, irremediablemente eran abrumadoras tanto las pruebas por sus homicidios sumándole las mas 80 agresiones sexuales con que se le acusaban. Participaron inclusive sicólogos en el juicio para demostrar que Kürten estaba cuerdo, por si quería zafar por ese lado.

Terminó guillotinado rápidamente y como corresponde, el 2 de julio de 1931 en la ciudad de Colonia. Un buen dato es que la Industria ese mismo año y sin perder tiempo, estreno la película “Fritz Lang” con la historia de Peter Kürten y como dijimos al principio protagonizada por Peter Lorre como el vampiro de Düsseldorf.

Se dice que Kürten habló con el verdugo previo a su ejecución y le preguntó; “Dígame, cuando me hayan decapitado ¿podré oír siquiera un momento el ruido de mi propia sangre saliendo del cuello?”.

Espero haber cumplido cabalmente con los amantes de este género. Para la próxima prometemos la historia de un carismático actor americano de los 70, que muere en el oriente a los 33 años despertando grandes mitos y leyendas urbanas hasta el día de hoy.

Una joyita de la industria vampírica. Uno de los primeros clásicos del cine de vampiros; M, el vampiro de Düsseldorf 1931 (película completa en español)