20 abril 2024
MÚSICA

Sixto Rodríguez, un caso insólito

‘Nadie es profeta en su tierra’. Mientras el músico en su país, colgaba por segunda vez la guitarra para trabajar en su oficio de albañil, su música era escuchada a miles de kilómetros atravesando el Océano Pacifico, donde sus presentaciones y giras lo estaban esperando.

Bajo el nombre Rod Riguez, en 1967 este músico nacido en un hogar de emigrantes mexicanos, publica su primer simple ‘I’ll Slip Away’, el cual vendió muy pocas copias como le ocurre a la mayoría de los artistas que recién comienzan.

Luego de un ‘parate’ de tres años, ingresa a la música nuevamente cuando logra firmar con Sussex y cambia su nombre profesional a Rodríguez. Con Sussex graba Cold Fact en 1970, y Coming from Reality en 1971. Pero luego de recibir críticas poco entusiastas y debido a las bajas ventas, fue despedido del sello, que cerró en 1975.

Tras su segundo fracaso, Sixto se derrumba y tira la toalla dedicándose de lleno nuevamente a su trabajo de albañilería y puntura de casas.

Insólito éxito

Aquella frase de que ‘nadie es profeta en su tierra’, se aplicaba perfectamente a Sixto Rodríguez, pues mientras en su país era prácticamente un desconocido, salvo por su círculo de afectos, en otras partes del mundo, miles de personas lo vitoreaban y escuchaba sus discos.

La imagen más utilizada para explicar el suceso del año 1975 a Sixto Rodríguez, es aquello del mensaje que se pone dentro de la botella pidiendo socorro después de un naufragio. El promedio de que alguien encuentre esa botella es uno entre millones. Pero lo cierto fue que a mediados de los años 70 sus álbumes comenzaron a ser muy difundidos en países como Sudáfrica, Rhodesia (hoy Zimbabue), Nueva Zelanda y Australia, sin que existieran agentes ni promotores en el medio.

¿Cómo hizo Sixto para ser popular en su país?

Como primera cosa, sus fans extranjeros se identificaban con Sixto en Sudáfrica más que nada por sus letras de gran contenido social, su dulce voz ronca y su música. Y lo segundo fue el tesón de sus fans en recomendarlo con sus amigos y conocidos. Realmente el suceso Sixto Rodríguez se logra con el poder del ‘boca a boca’ de la gente.

Esa popularidad, aunque fuera del país, hizo que Sixto retomara sus sueños, y pusiera sus energías nuevamente en la música. No solo comenzó a grabar nuevas canciones, sino que se embarcó en una gira en todos esos países donde se vendieron sus discos.

En una de sus giras se grabó un documental que luego fuera muy popular tanto en Sudáfrica como en los demás países relacionados con su música.

La fantasía, la memoria social, el imaginario colectivo fabricó su propia versión de la vida de Sixto Rodríguez y sobre su muerte, un escabroso suicidio en público del cantante, al terminar un concierto con gradas a reventar.

“Yo conozco a ese hombre, es mi padre. Y está vivo”. Fue el mensaje que dejó escrito una de las hijas de Rodríguez un buen día de 1998 en una página electrónica. A la voz de que encontraron a Sixto Rodríguez, en Sudáfrica nadie lo podía creer. Generaciones enteras, una tras otra, conocían y cantaban las letras de sus canciones que, además, son referentes de poesía popular con un gran sentido de la reivindicación de los oprimidos, los discriminados y los despojados.

En las imágenes del primer concierto que Rodríguez brinda en Sudáfrica resulta relevante la incredulidad, expresada en las caras de todos los asistentes. La expectativa acabó apenas se escuchó la cálida y ronca voz de Rodríguez, con la primera nota y se pudo comprobar que sonaba igual que los discos.

Este documental ganó un premio Oscar en el año 2013 y es la historia de la convergencia entre creador, mensaje y público; para lo cual, todos los elementos deben estar listos y dispuestos a comunicarse. La obra de Rodríguez es un eje cultural capaz de aglutinar a la gente alrededor de la humanidad, de la fraternidad, de la conciencia activa y la crítica aguda. Cuando Sixto Rodríguez lanzó sus discos en los años 70, fue como lanzar un par de botellas al mar que llegaron a un continente lejano causando toda una revolución.

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