19 abril 2024
PERSONALIDADES

Un sicópata asesino norcoreano

Para el Gobierno chino, es una “cuestión interna” que no afectará las relaciones “amistosas y de cooperación” entre los dos países. Pekín “ha tomado nota” del cese de Jang, pero lo considera “un asunto interno”.

“Como vecinos que mantenemos una relación de amistad, queremos la estabilidad, la paz y la felicidad de Corea del Norte”. “China está comprometida con una relación amistosa y de cooperación con Pyongyang”.
Luego de ejecutar a su tío y principal mentor, el líder norcoreano Kim Jong-un ordenó el exterminio de toda su familia.

La condena alcanzó también a niños de la familia, así como a funcionarios menores vinculados a su tío, ex hombre fuerte.

Toda la familia de Jang Song-thaek, tío y ex tutor del mandatario nocoreano Kim Jong-un, fue ejecutada en un intento de borrar a tres generaciones con origen en la antigua “eminencia gris” de Corea del Norte, “una escoria” que atentó contra el “espíritu revolucionario”.

Jang, que fuera considerado como número dos del régimen, ya había sido ejecutado el 12 de diciembre.

Según versiones no confirmadas, Jang fue encerrado con un centenar de perros famélicos que le dieron muerte.

Pero ahora la condena alcanzó también a sus familiares y personas cercanas, incluyendo a niños y funcionarios menores, según información de la prensa surcoreana.

Es incierta la suerte de Kim Kyong-hui, esposa de Jang y hermana menor del “querido líder” Kim Jong-il, padre del “joven general”, aunque las últimas versiones de inteligencia la dan en estado vegetativo debido a una enfermedad.

Los medios surcoreanos hablan de una amplia depuración, en realidad esperada por los expertos en cuestiones surcoreanas, que un funcionario del gobierno de Seúl describió en forma anónima al diario Chosun Ilbo como una acción de inédito alcance.

Si comenzó teniendo “como objetivo a Jang Song-thaek”, fue “llevada a cabo sobre una escala mucho más vasta de lo que podíamos pensar, atacando por doquier, desde los parientes directos hasta los funcionarios de bajo rango” cercanos al tío y ex tutor.

Siempre el mismo diario habla de más fuentes concordantes, pero los servicios secretos se niegan a dar informaciones.

Según las reconstrucciones, la hermana de Jang, Jang Kye-sun y su marido Jon Yong-jin, embajador en Cuba, más el jefe de la representación diplomática en Malasia, Jang Yong-chol, sobrino de Jang, fueron convocados a Pyongyang en diciembre y luego ejecutados.

Al parecer corrieron la misma suerte lo dos hijos de Jang Yong-chol, de poco más de 20 años.

No sólo eso: los hijos, las hijas y los nietos de los dos hermanos mayores de Jang, generales del ejército muertos tiempo atrás por enfermedades, también fueron eliminados.

No es fácil estimar los tiempos de la purga, pero si el ex tutor de Kim fue fusilado el 12 de diciembre, es verosímil que toda la operación se haya realizado inmediatamente después.

Por otra parte, el mismo “joven general” en su discurso de Año Nuevo a la nación había tenido palabras muy duras contra su tío, nunca nombrado explícitamente sino definido como “una escoria”, cuya caída había reforzado la unidad del país “cien veces”.

Además, el Partido de los Trabajadores había depurado a un grupo “antirrevolucionario en el momento oportuno y con una medida correcta”.

Jang, ejecutado por una acusación de alta traición y complot contra su sobrino, aunque más probablemente por fallos en la gestión de provisiones estratégicas como las energéticas y alimentarias, era el tercero de una familia de tres hijos y dos hijas, con un número considerable de sobrinos.
Esposa y parientes del ex embajador en Malasia, al parecer, se salvaron y -según otras fuentes- fueron enviados a pueblos remotos junto con sus familias de origen.

Entretanto, Corea del Sur respondió a la propuesta del Norte sobre reuniones entre las familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53), proponiendo el período 17 al 22 de febrero en el resort del monte Kumgang, sobre la costa oriental del enclave norcoreano.

Si todo avanza, además de un inesperado deshielo sería el primer ciclo de encuentros desde fines de 2010.

Este gesto del régimen norcoreano viene luego de una serie de amenazas y declaraciones destempladas lanzadas por Kim Jong-un durante el año 2013.
Las maniobras militares conjuntas entre Corea del Sur y Estados Unidos habían sido oportunos factores de exacerbación de los ánimos para el régimen de Pyongyang.

Ahora, Kim Jong-un parece enfocado a una depuración total de su entorno quizá con vistas a una nueva etapa.

La República Popular Democrática de Corea, conocida como Corea del Norte para distinguirla de Corea del Sur.

Ocupa la porción septentrional de la Península de Corea, situada al este de la República Popular China, entre los mares del Japón y Amarillo. Limita al norte con China, al noreste con Rusia, al este con el mar del Japón, al sur con la República de Corea (Corea del Sur) y al oeste con la bahía de Corea y el mar Amarillo.

La península fue gobernada por el Imperio coreano hasta que fue conquistada por Japón después de la Guerra Ruso-Japonesa de 1905.
En 1945 ―justo después de la Segunda Guerra Mundial― la península fue dividida en dos zonas, la ocupada por la Unión Soviética y la ocupada por Estados Unidos.

En 1948, Corea del Norte rechazó participar en las elecciones celebradas al amparo de las Naciones Unidas, que finalmente crearía dos gobiernos independientes en cada una de las zonas ocupadas.

Ambos Estados reclamaban la península entera como territorio propio, lo que los llevaría a la Guerra de Corea en 1950.

La firma del armisticio en 1953 terminó con la lucha.

Sin embargo, oficialmente los dos países siguen en guerra y todavía no se ha firmado un tratado de paz.

La ocupación militar japonesa de Corea terminó con el fin de la Segunda Guerra Mundial y la rendición de Japón, anunciada el 15 de agosto de 1945.
El 8 de agosto, la Unión Soviética rompió el pacto de no agresión que había firmado con Japón en abril de 1941 y procedió a la ocupación de Manchuria, Corea, y las islas de Sajalin y Kuriles.

El 10 de agosto de 1941, el gobierno estadounidense, que en ese momento no disponía de tropas desplegadas en la península, ordenó que se delimitasen dos zonas de ocupación y eligió arbitrariamente una demarcación a lo largo del paralelo 38, que fue aceptada de inmediato por los soviéticos.

Después de tres años en los que fracasaron varios proyectos de unificación, el 15 de agosto de 1948 los estadounidenses crearon la República de Corea en el sur, presidida por Syngman Rhee, un veterano político exiliado en Hawái y opositor a la invasión japonesa de Corea.

En respuesta, los rusos reconocieron el 9 de septiembre la República Popular Democrática de Corea, con un gobierno encabezado por Kim Il-sung, que había luchado desde 1932 contra los japoneses, quienes lo consideraban uno de los líderes guerrilleros coreanos más populares y peligrosos.

El gobierno del norte adoptó una forma autocrática y el del sur inició la represión de la guerrilla procomunista y de otros movimientos de izquierda, pero ambos regímenes, una vez retiradas las fuerzas ocupantes, aspiraban por igual a unificar el país bajo su mando.

Se sucedieron las provocaciones fronterizas y tanto Rhee como Kim-Il-sung solicitaron apoyo para una invasión, pero estadounidenses y soviéticos se negaron a concederlo en primera instancia, aunque finalmente Stalin le prestó al líder norcoreano un respaldo limitado y condicionado a la aceptación de Mao.

Mao reaccionó con prudencia y le pidió a Stalin confirmación de la versión de Kim, mientras que este ordenó que se excluyera a los chinos de cualquier planificación militar, lo que incluía ocultarles la misma fecha del ataque.

La guerra estalló finalmente cuando, en la madrugada del 25 de junio de 1950, el Ejército Popular de Corea atravesó la frontera del paralelo 38 y llegó en solo tres días a las puertas de Seúl.

Los estadounidenses consiguieron que se aprobara el 27 de junio, gracias a que la Unión Soviética no ejerció su derecho de veto, una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en apoyo a la intervención militar internacional, aunque no pudieron evitar el avance de los norcoreanos, que a finales de agosto dominaban casi la totalidad de la península.

Sin embargo, después del desembarco de Inchon, el 15 de septiembre, tras las líneas del cansado ejército del norte, los estadounidenses avanzaron rápidamente y tomaron Seúl el día 26 y Pionyang el 19 de octubre, el mismo día que Mao decidió intervenir directamente.

El «Ejército de Voluntarios del Pueblo Chino», dirigido por Peng Dehuai, infligió inicialmente graves derrotas a los estadounidenses (hasta el punto de que MacArthur llegó a proponer la utilización armas nucleares, lo cual a mi modo de ver le valió la antipatía de Harry Truman y el cargo) y recuperó Seúl el 4 de enero de 1951.

Un mes después los estadounidenses contraatacaron, recuperaron Seúl y avanzaron hacia el paralelo 38, en torno al cual construyeron una línea fortificada de defensa.

La guerra entró entonces en una fase de estancamiento, aunque prosiguieron los bombardeos intensivos sobre Corea del Norte, hasta que el 27 de julio de 1953 se firmó en Panmunjom un armisticio, que restauró la frontera del paralelo 38 anterior a la guerra, si bien no concluyó en un tratado de paz definitivo.

Corea del Norte fue dirigida por Kim Il Sung desde 1948 hasta su muerte, el 8 de julio de 1994.

Después, el 8 de octubre de 1997, su hijo Kim Jong-il fue elegido por la Asamblea Popular Suprema como Secretario General del Partido de los Trabajadores Coreanos y en 1998 como presidente de la Comisión Nacional de Defensa y su posición fue declarada como «el cargo más alto del Estado», tras una reforma de la Constitución del país, elaborada en 1972, dejando el cargo de presidente vacante en recuerdo a la memoria de Kim Il-sung.

Generalmente, las relaciones internacionales mejoraron, como durante el gobierno de Bill Clinton.

Incluso hubo una cumbre histórica entre Seúl y Pionyang en junio de 2000.
Más tarde, en 2008, el entonces presidente de Estados Unidos George Walker Bush cambió sus políticas frente Corea del Norte, pidiendo el desarme y suspensión de su programa de armas nucleares; por su parte Pionyang pidió a cambio de esto borrar a su nación de la lista negra del terrorismo y que Estados Unidos le suministrase de combustible y energía.
Durante el mandato de Kim Jong-il a finales de la década de los años 90, la economía del país descendió considerablemente y la escasez de comida se hizo evidente en numerosas áreas.

Según algunas organizaciones humanitarias, un desconocido pero gran número de personas (algunas cifran el número en torno a los tres millones; The Economist estimó que entre 600 000 y 1 000 000) murieron como consecuencia de la hambruna norcoreana que padeció el país entre 1995 y 1998, intensificada por un colapso en el sistema de distribución de comida.
Numerosos norcoreanos entraron ilegalmente en China en busca de alimentos.

Corea del Norte es uno de los sitios más aislados del mundo, con severas restricciones en la entrada o salida de personas del país. La prensa está controlada por el Estado y las organizaciones de masas, que se rigen bajo los principios de la idea Juche, una interpretación coreana del socialismo.

El 17 de diciembre de 2011 el líder supremo Kim Jong-il falleció mientras realizaba un viaje en tren.

Su hijo, el joven Kim Jong-un, que fue designado heredero del gobierno el 28 de septiembre de 2010, asumió las tareas de jefe del Estado.

El 8 de marzo de 2013, Corea del Norte anunció el fin del acuerdo de no agresión con Corea del Sur debido a las sanciones de la ONU por las pruebas nucleares realizadas en 2012, y por considerar una amenaza las maniobras de entrenamiento militares en conjunto entre Estados Unidos y su vecino del sur.

Dando inicio a la Tensión de Corea que se desarrolla en los primeros meses de 2013.

El 29 de marzo de 2013, Corea del Norte declara estado de guerra a Corea del Sur.

Por sus procederes y las formas de ejecución que adopta Kim Jong-un, ese permanente estado de preguerra en un país que inclusive padece hambrunas, la forma feroz de eliminar a sus ex socios en la tarea y familiares de su propia sangre, incluidos niños, usando inclusive perros hambrientos nos hablan de un sicópata asesina de la peor calaña.

2 comentarios en «Un sicópata asesino norcoreano»

  • antes pasaba en otros lados inclusive en el interior de los paises lo de que cuando no le gustas al amo te mataban sin vuelta
    los coreanos sihuen con esa tradicion con timidas voces en contra.

  • Quien se va a meter con Corea del Norte? Todos saven quien les guiñó el ojo siempre, nadie se mete con el mostro asiatico , por mas que gasten tinta y saliva se sabe que por esos lugares todo esta permitido y el mundo cayadito debe mirar obedientemente para otro lado.

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