Semana de la Moda en una azotea de Nueva York
En el punto más alto de difusión tecnológica, las firmas tradicionales deciden no jugar
Todo comienza en Nueva York. El principal evento de la moda mundial nace el año 1943, cuando la publicista Eleanor Lambert enciende la mecha promoviendo una semana se la moda en lo local. Luego esa promoción fue creciendo, hasta convertirse en mundial. Por ello la cuna de la Semana de la Moda, es Nueva York. Es donde primero empieza. Luego vienen las Semanas de la Modas de Londres, Milán, París, etc.
Por ello es qué la Semana de la Moda de Nueva York, es en donde las grandes firmas juegan los mejores cartuchos de sus colecciones; para desde allí ganar espacios para sus colecciones en las siguientes presentaciones de las pasarelas europeas.
El sistema junto a las grandes firmas, se pudo defender de todos los males del mundo durante largos 77 años. La Semana de la Moda ha transitado exitosa varias pandemias, huracanes, Tsunamis, las segunda guerra mundial, la guerra fría, la de Vietnam, etc.
Durate 77 años, el mundo ha sufrido un sinnúmero de catástrofes. Sin embargo la Semana de la Moda, nada les ha impedido funcionar. “Mientras las colecciones calcen en las modelos, los desfiles no se suspenden”, diría la emblemática Gabrielle Chanel, mas conocida como Coco Chanel.
El gigante deja sus piezas en el camino
Ante la presencia de bombas y ejércitos, siempre se aseguraba un lugar donde extender la alfombra roja para que desfilen las colecciones que serían tendencia mundial de la moda. Por ello la Semana de la Moda, fue un gigante que manejaba su propia agenda en el mundo.
En la actualidad, un minúsculo virus invisible, llamado Covid-19, consiguió lo que ninguna anterior guerra ni catástrofe ha logrado jamás; poner de rodillas a ese gigante. Y fue mas allá de lo esperado, pues se fueron erosionando la firmas más tradicionales al punto de bajarse de la Semana de la Moda de Nueva York.
El espacio que están dejando las grandes firmas, comienzan a ser ocupados por nuevos jóvenes emprendedores, los cuales se acomodaran más rápido con las nuevas tecnologías.
Quien comenzó a liderar en los espacios que dejan vacante las grades firmas, es el diseñador taiwanés- canadiense Jason Wu. Este joven de 37 años se destacó en sus comienzos por vestir a Michelle Obama, cuando era la primera dama de los EEUU.
También Jason Wu, toma la batuta en ante las autoridades neoyorquinas y logra realizar un desfile presencial, previo al internacional, para un reducido público de 50 personas. Sin embargo este joven empresario como la amplia mayoría de nueva camada de la moda, utilizan todas las plataformas tecnológicas para potenciar sus negocios.
Y quizás los cambios para las tradicionales firmas de la moda sean su punto débil ante las nuevas plataformas. La única explicación lógica debe ser esa. No olvidemos el público a quien va dirigido. Ya que las personas más jóvenes son las que tienen mayor predisposición a las nuevas tecnologías. Mientras que a las personas nacidas antes del 2000, se les dificulta más esa relación.
Es un divino pero Jason Wu ya quedo en el partido democrata y si vistio a Michele Obama nunca va a vestir a Ivana Trump y mas conociendo a Trump jejejeje