Los cameos de Trump
Por Niquita Nipone
Un cameo es la aparición breve de una persona conocida en una película o video, normalmente representándose a sí mismo o a un personaje sin nombre que puede no tener importancia para la trama. Normalmente, el actor ni siquiera aparece en los créditos.
‘LOS FANTASMAS NO PUEDEN HACERLO’ (JOHN DEREK, 1989)
Donald Trump entró a lo grande en el mundo del cine, con este un vehículo de John Derek para su mujer Bo, sex symbol del momento, que obtuvo cuatro Razzies.
Entre ellos, uno para el millonario como Peor secundario.
‘El más insultante de estos premios es el que ganas por interpretarte a ti mismo’, ha comentado John Wilson, que fundó estos contrapremios en 1981.
Los cameos de Trump: de ‘Solo en casa 2’ a ‘El Príncipe de Bel Air’
El programa ‘La Noche De…’ repasa, mediante este reportaje, los cameos y apariciones estelares de Donald Trump en películas y series de televisión.
Ya son unos cuantos actores famosos Hollywood los que han mostrado su total oposición al candidato Donald Trump, sobre todo por las acusaciones de acoso sexual que pesan sobre él, pero también por sus insultos contra musulmanes, mexicanos y contra cualquiera que no sea blanco.
Por todo ello, Robert De Niro ha dicho que ‘le daría un puñetazo’, y también se han posicionado contra Trump Scarlett Johansson, Robert Downey Junior o Julianne Moore, entre otros muchos.
Es de destacar el caso de Will Smith, que acusa al político de ‘racista y machista’, y que, a la vez, agradece que Trump hable tanto, porque así se desenmascara. Lo curioso es que, en sus años mozos, Will Smith era casi un fan de Donald Trump, y la prueba es que, en el año 1994, el propio Trump hizo un cameo en El príncipe de Bel Air. 22 años más joven, Trump acudió junto a su esposa de aquel entonces: la modelo Marla Maples.
En ese capítulo, Donald Trump quiere comprar, por un dineral, la casa en la que viven Will Smith y su familia.
Y el propio Will se muestra encantado de recibir el dinero de Trump.
Llama la atención el servilismo de Will Smith, comparado con el desprecio que siente ahora hacia Donald Trump.
Este es sólo uno de los 23 cameos que ha hecho Trump en cine y televisión, mostrándose en todos ellos como un verdadero ’empresario de éxito’.
Por algo aparece, junto a Whoopi Goldberg, en una película titulada Cómo triunfar en Wall Street.
Entre los cameos más curiosos de Donald Trump destacan los siguientes: Lo vimos con el famoso Hugh Grant en Amor con preaviso, y también actuó, con Macaulay Culkin, en Solo en Casa 2: perdido en Nueva York, así como en Sexo en Nueva York, junto a Kim Cattrall, o en la película de Woody Allen Celebrity.
En la vida real, es cierto que Trump intentó levantar un centro de convenciones en la mitad de Nueva York. Pero el presupuesto se disparó hasta los 110 millones de dólares, y el proyecto fue rechazado.
En cuanto a sus negocios, Trump entró en bancarrota a finales de los años ochenta, se declaró en suspensión de pagos y provocó pérdidas millonarias a todos sus inversores.
Y fue justo después de esos fracasos cuando empezaron sus continuos cameos, con el probable objetivo de ‘limpiar su imagen’.
Puestos a escoger el mejor cameo de Donald Trump, nos quedamos con uno en el que se predijo el futuro en la serie De repente, Susan, donde la gran protagonista era Brooke Shields.
En dicha escena, proponen a Trump ser portada de una revista, y en esa portada se preguntan si él será ‘nuestro próximo presidente’. Así que, en cierto modo, en esta serie de 1997, se predijo su actual candidatura a la presidencia de los Estados Unidos, casi 20 años antes de que Trump fuera candidato.
Nuevas acusaciones de abusos enturbian la recta final de la campaña de Trump
Los abusos sexuales de Bill Clinton hacia otras mujeres en el pasado fue el arma escogida por Donald Trump para cargar contra Hillary Clinton en el segundo debate presidencial.Ahora se ha girado la tortilla para el magnate republicano y, de momento, tres mujeres han denunciado que Trump se sobrepasó con ellas.
Dos de ellas hicieron la denuncia al prestigioso diario The New York Times. La cabecera, posicionada claramente a favor de Clinton en la carrera hacia la Casa Blanca, dedicó un extenso reportaje a las “víctimas” e incluso publicaron un vídeo donde una de las mujeres cuenta lo ocurrido.
La respuesta de Donald Trump no se ha hecho esperar y ya ha amenazado con denunciar al periódico.
El artículo relata el caso a dos mujeres, Jessica Leeds y Rachel Crooks, quienes dijeron que Trump las tocó de manera inapropiada.
La primera afirma que el magnate le tocó los pechos e intentó meter su mano debajo de la falda hace tres décadas en un vuelo a Nueva York. Ambos iban en primera clase, pero no se conocían de nada.
“Era como un pulpo. Fue una agresión”, recuerda la afectada antes de explicar que salió corriendo de allí para sentarse en las últimas filas del vuelo.
Esta víctima, que ahora tiene 74 años, no denunció los hechos al personal del avión porque “en esa época las mujeres de negocios a menudo tenían que soportar esos comportamientos de sus compañeros varones”.
El segundo testimonio de The New York Times, Rachel Crooks, asegura que en el año 2005 el candidato republicano se sobrepasó en un ascensor de la Trump Tower (Manhattan).
Según relata, ella – que por entonces tenía 22 años- se presentó al magnate ya que su empresa hacía negocios con él. Trump respondió al saludo lanzándose a sus labios.
“Me besó directamente en la boca.
Fue muy inapropiado (…)
Estaba tan cabreada de que él pensara que yo era tan insignificante como para poder hacerme eso”, explica Crooks apuntando que no fue un beso accidental, sino una “violación”.
Tras el incidente del ascensor, la mujer regresó a su mesa y telefoneó a su hermana, Brianne Webb, para contarle lo ocurrido.
Da la casualidad de que este segundo episodio sucedió en el año 2005, el mismo año en el que se grabó el polémico vídeo de Trumpdonde vierte expresiones groseras y machistas hacia las mujeres.
The New York Times contactó con el candidato republicano el pasado martes para que diera su versión de lo ocurrido.
Lo negó todo, como ya hizo en el debate contra Hillary Clinton.
La tercera supuesta víctima de Trump es de Florida y denunció los abusos del magnate en el periódico local Palm Beach Post.
Mindy McGillivray afirma que el magnate la “toqueteó” en el año 2003 al término de un concierto en el hotel Mar-a-Lago, ubicado en Palm Beach (EE.UU.), y de la propiedad de Trump.
Los hechos se remontan a un recital de Ray Charles en este hotel del sur de Florida.
Ella fue como asistenta del fotógrafo Ken Davidoof.
En un momento dado estaban detrás del escenario, donde se ubicaba Trump con su prometida Melania, y sintió como la agarraban y le daban un empujón.
“Sentí un toqueteo, un pequeño empujón.
Creí que era la bolsa de la cámara de Ken, fue mi primer instinto.
Me di la vuelta y ahí estaba Donald.
Él quitó la mirada rápidamente y yo en seguida me giré hacia la dirección donde estaba Ray Charles.
Me quedé aturdida”, recuerda esta mujer.
“Fue bastante cerca del centro de mi trasero.
Me sobresalté y salté rápidamente”.
Ese no fue el único incidente que McGillivray dice haber tenido con Trump. Dos años antes de ese concierto tuvo otro encuentro con el magnate en el mismo hotel durante una fiesta de nochevieja.
Ella volvió a ir en calidad de ayudante de fotografía con Ken y Donald la abordó a la salida del baño.
“Tenía ese tono cortés.
Estaba totalmente coqueteando conmigo”.
Trump aseguró en el debate contra Hilarry Clinton que él respetaba a las mujeres como el que más
Mindy McGillivray nunca hizo una denuncia sobre sus encuentros con Trump, pero a raíz del debate presidencial donde el magnate dijo respetar tanto a las mujeres sintió que era el momento de desvelar su historia.
Trump no es un politico es un empresrio muy exitoso.
La gente esta harta de los politicos incapaces que promeeten cosas para que la gente los vote y nunca hacen nada.
Hay que probar con gente nueva y Trump es una buena eleccion.
Si se largara uno asi aca gana las elecciones la gente esta harta ya de tanto politico de pacotilla.