Al final Hugh Hefner se casó

En esa época los desnudos estaban relegados a revistas marginales y semiclandestinas, él reivindicó la sexualidad humana, como materia comercial en los medios, no habiendo estudiado sicología en vano..

Tuvo experiencias previas en una revista llamada Children’s Activities cuando tenía 27 años de edad.

De la primera se vendieron 53991 revistas, y fue considerado un éxito, por la temática, pero ese número de ejemplares causaría risa hasta en Montevideo de hoy.

Hefner había comprado los derechos de una fotografía de Marilyn Monroe, la del almohadón, de cuando no era famosa, ni Marilyn, ni la foto, pero la publicó cuando ya era una actriz renombrada y fue la portada de la revista y desnuda en la página desplegable central.

En 1960 dirigía su imperio desde la amplia cama de la Mansión Playboy de Chicago.

En ese entonces era dueño de una cadena de clubes nocturnos, atendidos por dichas jóvenes disfrazadas de conejitas con un simple sombrerito con orejas largas y amplió el giro en casinos y hoteles.

A partir de 1962 el esquema publicaciones abarcaba dos rubros, uno erótico, que en aquella época era tomado con un tufillo –y no sin razón- a pornográfico y otro una buena entrevista a personalidades de la época.

Aquella época era muy cuáquera con el cuerpo, las palabras y el sexo, claro que existían los adulterios, la prostitución y el mundo de homosexuales de ambos sexos, pero era pecado capital ventilarlo.

Ambos temas se retroalimentaban, porque si era entrevistado en esa revista iba a tener público lector y el que leía artículos de interés, le pegaba el ojo a las diosas de la época.

Además un rubro servía de excusa para tapar el otro.
¡La compré por los artículos de interés y no por las mujeres desnudas !!!, ¿verdad?

Cinismo mezclado con la más redonda de las mentiras.

Acá en Montevideo, se vendía la revista en una bolsa de plástico negra, cuando no se estilaba, casi para nada, el uso de dicho material.

Fueron entrevistados entre otros famosos por la revista Fidel Castro, Malcolm X, Bertrand Russell, Salvador Dalí, Martín Luther King Jr. , Jean Paul Sartre, George Wallace, Cassius Clay, Orson Welles, Yasser Arafat, Stephen Hawking, Carl Sagan y John Lennon.

Una galería de grandes, opinable o no, del mundo de la política, integracionistas raciales, filósofos, artistas plásticos, teóricos políticos, políticos reales, boxeadores, actores de primera línea, líderes, escritores y músicos de real valía.

En su mejor época 1972 llegó a vender 7.161.561 ejemplares, claro que como suele ocurrir en este mundo la competencia no se quedó quieta y copiaron el o los esquemas poniendo las tintas en distintos lugares.

Pero Hugh Hefner, nunca se durmió en la largada ni en la llegada, sino que fundó Playboy Enterprises Inc que abarca desde las publicaciones mensuales de mujeres semidesnudas en poses elegantes y más bien sugerentes, a pesar de que los grupos puritanos y guardianes de la moral ajena acusaron, a Hugh Hefner de explotar la belleza femenina para su beneficio personal, claro que muchas que se hicieron famosas por su aparición en la revista no se enojaron, ni hicieron juicios.
El negocio de Hefner no sólo estaba en las revistas y los royalties de un montón de productos vinculados con las conejitas y los clubes nocturnos y otros menesteres menos altruistas pero más redituables.

No se me quede serio y pensativo cuando lea lo siguiente:
En los últimos años se ha dado a conocer que Playboy posee un gran impacto en el mercado femenino, contando con un 40% de suscriptores que son mujeres, claro que este porcentaje no corre ni corría para Uruguay.

La revista se edita para un público que va entre los 18 y 35 años y las entrevistas se han adaptado para este sector.

Christin Hefner, hija de Hugh es la cabeza oficial del grupo y presidente del consejo.

La hija resultó un avión para los negocios, como su padre en sus comienzos y extendió la gama comercial al mundo del cine, el video, la TV Cable y la cibernética, convirtiéndose en una sólida y moderna corporación.

Después de está introducción vamos al tema en cuestión, nuestro homenajeado de hoy, Hugh Hefner, con 86 años de edad, se casó a fin de año, con una conejita de su casa, de su empresa, Crystal Harris de 26 años.

No se moleste en hacer cuentas, para eso estamos nosotros, le lleva algo más de 60 años de edad a su novia.
Le entregó un cintillo y luego tuvo que aclarar por los medios, como es de estilo, todo vía Twitter,

“Sí, el anillo que le di a Crystal es un anillo de compromiso. No es mi intención crear un misterio. Feliz Navidad para todos.”

Estuvo por casarse con la misma conejita en Navidad de 2010, pero por pitos o por flautas recién lo concretó ahora.

Antes de entrar en la parte del chusmerío y de los comentarios sanos y maliciosos sobre el tema vamos a aclarar que:

Hef se casó por primera vez con Mildred Williams en 1949 y se divorció en 1959 (esta primera señora no pertenecía al ambiente en que hizo sus negocios y fama su esposo).

Su segundo matrimonio fue con Kimberley Conrad (1989 – 2009). Tuvo dos hijos con la primera Christie, 1952; David, 1955.

Con la segunda también tuvo dos hijos Marston (1990) y Cooper (1991).
Después de esta segunda etapa volvió a la soltería y a su viejo estilo de vida, por lo que ha aparecido públicamente alabando las bondades del Viagra.

Su casa es una especie de falsa mansión rural inglesa, por lo que hay que hacer un tour antes de conversar con su dueño.

El jardín está lleno de animales: conejos, grullas, flamencos, monos. Es necesario cruzar por él para llegar a la Casa de los Juegos, donde mantiene un despliegue inmenso de flippers y video juegos.
Después se llega al lugar preferido de Hefner: La Gruta, un jacuzzi situado en una cueva de techo bajo.

La sensibilidad de esta nueva, bueno nueva no, más bien cónyuge de Hugh es conmovedora, cuando recibió el anillo se puso a llorar.
Y la afortunada manifestó que “Ha sido mi Navidad más memorable”(Esto fue en 2010).

Es comprensible tanto las lágrimas como de que sea la navidad más recordable, porque a los 26 años puede haber tenido muchas noches buenas pero muy pocas navidades como esta.

Hay comentarios de todo tipo, muchos maliciosos como ser:
-“Yo me considero un viejo verde… pero lo de este mister ya es de dar vergüenza ajena”.

-“¿Por qué no puede existir el verdadero amor para esta pareja? Jajá jajá. Déjenme de embromar que no es serio esto. ¿Puede haber alguien tan tonto como para creer en el amor de ella????

-“Qué lindo que la gente se quiera!!! El caso de este muchacho y la chiquilla demuestra que el amor todo lo puede… marche una American Express platinoo…”

-“Ay el amor, el amor… que lindo que la gente se quiera. La novia verá asegurado su futuro y el novio quien le cambie los pañales”

Otros ingenuos:

-“Difícil creer en el amor y la fidelidad con ejemplos como este, no? Qué significado puede tener esto, acaso el de creer en la compañía, tanto en la enfermedad como en la prosperidad?
Me duelo por el maltrato hacia la moral tradicional, que parece en vías de extinción”.

En lo que me es personal, pienso que en la verdad o en la mentira, si el señor Hugh Hefner fabricó un negocio multimillonario, sigue en el mismo rumbo y no dio quiebra es porque atrás del mismo hay un capital monstruoso.

Si el hombre está lúcido e intelectualmente capaz, tiene derecho a casarse con quien se le dé la real gana.

Por lo que veo la corporación que es donde está la mosca la maneja su hija Christine, a esta conejita, porque de ahí la sacó el amigo Hef y sabe con la mercadería, porque para él siempre fueron mercadería, con que está trabajando.

Si se casó es su alegría y su problema y no le está dictando normas de conducta a nadie y los que le tiran piedras al rancho, tal vez en su casa tengan techo de cristal.

Creo en la libertad del hombre y sobre todo que nadie le vendió nada equivocado, no se casó con una doncella y el lo sabe muy bien, porque hace rato que está en su harem, no sé si de uso público o privado, o de a ratos en uno y en otro.

Nadie criticó que el dinero lo había hecho con la prostitución, la hotelería derivada, el juego y otros vicios sociales.

Les molesta que se haya casado con una conejita de su cosecha a la cual le lleva más de 60 años.

Muy bien Hef hágase tu voluntad y felice morti…siamo tutti contenti…y los que se hacen problemas que arreglen los propios.